Son las 18:57. Hace exactamente 25 años, el secretario de información del Sozialistische Einheitspartei Deutschlands (SED, principal partido de la Alemania del Este), Günter Schabowski, concluye en Berlín una rueda de prensa tras la reunión de la dirección política del país. En este mismo momento, tras anunciar que el gobierno ha decidido dejar que la población viaje libremente al extranjero, un periodista le pregunta sobre la fecha de entrada en vigor de esa libertad y el secretario le contesta sin darle demasiada importancia: «Das tritt nach meiner Kenntnis… ist das sofort, unverzüglich.» Es decir: «Que yo sepa, de inmediato.» Los Alemanes del Este, que están siguiendo la rueda de prensa en directo por la televisión del régimen, se precipitan hacia el muro, donde los guardias se ven desbordados y abren las puertas.

La entrada en vigor de la norma no estaba prevista para esa misma noche, pero sin darse cuenta del enorme poder de sus palabras, el portavoz Schabowski propició una acción inmediata tan masiva que desembocó en la libertad. La caída del muro de Berlín acabó con aquella depresiva y agotada República democrática de Alemania, abriéndose la era de una nueva Europa.